De viento...


No quiso despedirse de los ojos que durante tanto tiempo había mirado; se cansó de sus caprichos. Cerró la puerta y el silencio es lo único que dejó tras de si. Y aun sabiendo que fue una decisión precipitada, todavía sigue esperando en la cornisa que alguien lo rescate del suicidio.

Comentarios

trescatorce ha dicho que…
Seguro que un día encontrará quien le coja de la mano. :)
Connie ha dicho que…
Muy bonito Javi, precioso

Entradas populares